Podemos decir que vivimos en un mundo donde las dietas, el gimnasio, la bascula están ocupando desde hace ya cierto tiempo un sitial bastante importante en nuestras vidas, pero que pasa cuando estos elementos son parte vital para la vida de un menor, estamos hablando de Connor, quien con solo ocho anos, tiene el peso de un hombre adulto promedio, sus cincuenta y cinco kilos de sobre peso le están quitando calidad de vida y vida ya que lo están condenando a ser un adulto con problemas coronarios , diabetes y que por los pronósticos podría no pasar de los treinta anos de edad. Esto nos hace reflexionar, a veces como padres damos, damos y damos sin hacer un alto y pensar si dar de mas no es quitarle algo a nuestros hijos, eso lo hacemos con la comida, con los obsequios, con los permisos y no vemos que el resultado puede ser en detrimento de ese ser al que tanto adoramos, el articulo lo pueden ver en El PAÍS.com y yo lo que los invito a hacer un momento de reflexion con esos seres chiquitos que tanto nos llenan nuestras vidas, antes que sea tarde.
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